Con España como campeón por primera vez este domingo, el primer Mundial de fútbol disputado en suelo africano estuvo marcado también por una serie de circunstancias inéditas y sin precedentes, como récords de diversa índole, que entraron ya en los anales de este deporte.
El alemán Miroslav Klose estuvo a punto de firmar uno de ellos, pero con cuatro dianas en suelo sudafricana elevó su cuenta total en el torneo a 14 (5 en 2002 y otros 5 en 2006), igualando con su mítico compatriota Gerd Müller, pero quedando a uno del récord de quince del brasileño Ronaldo.
"Felicitaciones a Klose, hacer 14 goles en Copa del Mundo es fantástico", dijo el propio Ronaldo justo después del último partido de los germanos en el torneo.
Alemania pudo al menos consolarse con un récord de presencias mundialistas: un total de 99 partidos tras las diecinueve ediciones, superando la marca de 97 de Brasil, eliminado en cuartos de final y que disputó dos encuentros menos que la ''Mannschaft'' en Sudáfrica-2010.
La ''Seleçao'' sí batió una plusmarca, pero bastante menos positiva: con las expulsiones de Kaká y Felipe Melo acumula un total de 11 rojas en la historia del torneo, superando en una a Argentina, que también cayó en cuartos pero no vio a ninguno de sus hombres irse a los vestuarios bruscamente por este motivo.
El Mundial destacó por otras circunstancias sin precedentes, como la eliminación del anfitrión en la primera ronda, algo que hasta el momento no había ocurrido, o por el adiós también en el grupo de arranque de los dos finalistas del último Mundial, Italia y Francia, grandísimas decepciones.
Sudamérica hizo historia al situar cuatro equipos en cuartos, algo que nunca había hecho, pero su sueño se evaporó pronto y sólo colocó a un representante en ''semis'', Uruguay, que firmó su mejor resultado en cuarenta años, pero fue incapaz de aprobar el duro examen de los holandeses (3-2).
Ese adiós charrúa aseguró una final 100% europea (Holanda-España finalmente) y que Europa alcanzara la cifra de diez coronas, un récord que le permite dejar atrás a la otra gran potencia territorial del balompié, Sudamérica, que se conforma con nueve y buscará la revancha ''en casa'', en Brasil-2014.
Entre los africanos, Ghana igualó las mejores actuaciones históricas de los equipos de su continente, llegando a cuartos, como Camerún en Italia-1990 y Senegal en Corea del Sur/Japón-2002, pero fue incapaz de derribar ese techo.
En lo que se refiere a la imbatilidad, dos fueron las marcas más destacadas. Suiza amplió a 559 el récord de un equipo sin recibir un gol en una fase final mundialista, gracias a su papel en Alemania-2006, el primer partido en 2010 ante España (victoria 1-0) y los 75 minutos que estuvo ante Chile sin recibir un tanto, hasta que Mark González puso punto final a la racha.
En la ''Roja'', el portero
El alemán Miroslav Klose estuvo a punto de firmar uno de ellos, pero con cuatro dianas en suelo sudafricana elevó su cuenta total en el torneo a 14 (5 en 2002 y otros 5 en 2006), igualando con su mítico compatriota Gerd Müller, pero quedando a uno del récord de quince del brasileño Ronaldo.
"Felicitaciones a Klose, hacer 14 goles en Copa del Mundo es fantástico", dijo el propio Ronaldo justo después del último partido de los germanos en el torneo.
Alemania pudo al menos consolarse con un récord de presencias mundialistas: un total de 99 partidos tras las diecinueve ediciones, superando la marca de 97 de Brasil, eliminado en cuartos de final y que disputó dos encuentros menos que la ''Mannschaft'' en Sudáfrica-2010.
La ''Seleçao'' sí batió una plusmarca, pero bastante menos positiva: con las expulsiones de Kaká y Felipe Melo acumula un total de 11 rojas en la historia del torneo, superando en una a Argentina, que también cayó en cuartos pero no vio a ninguno de sus hombres irse a los vestuarios bruscamente por este motivo.
El Mundial destacó por otras circunstancias sin precedentes, como la eliminación del anfitrión en la primera ronda, algo que hasta el momento no había ocurrido, o por el adiós también en el grupo de arranque de los dos finalistas del último Mundial, Italia y Francia, grandísimas decepciones.
Sudamérica hizo historia al situar cuatro equipos en cuartos, algo que nunca había hecho, pero su sueño se evaporó pronto y sólo colocó a un representante en ''semis'', Uruguay, que firmó su mejor resultado en cuarenta años, pero fue incapaz de aprobar el duro examen de los holandeses (3-2).
Ese adiós charrúa aseguró una final 100% europea (Holanda-España finalmente) y que Europa alcanzara la cifra de diez coronas, un récord que le permite dejar atrás a la otra gran potencia territorial del balompié, Sudamérica, que se conforma con nueve y buscará la revancha ''en casa'', en Brasil-2014.
Entre los africanos, Ghana igualó las mejores actuaciones históricas de los equipos de su continente, llegando a cuartos, como Camerún en Italia-1990 y Senegal en Corea del Sur/Japón-2002, pero fue incapaz de derribar ese techo.
En lo que se refiere a la imbatilidad, dos fueron las marcas más destacadas. Suiza amplió a 559 el récord de un equipo sin recibir un gol en una fase final mundialista, gracias a su papel en Alemania-2006, el primer partido en 2010 ante España (victoria 1-0) y los 75 minutos que estuvo ante Chile sin recibir un tanto, hasta que Mark González puso punto final a la racha.
En la ''Roja'', el portero
